El Caribe es Jazz – Concierto que estremece el Teatro Regional Cibao
Estaba muy claro que la actividad principal de las ofertas artísticas del MIC IV sería el concierto ¨El Caribe es Jazz¨. Más de dos horas después de haber empezado fue confirmado lo que todos sabían, que ésta sería una velada inolvidable llena de música de muy alto nivel, octanaje y más. El escenario de la Sala Restauración del Teatro regional Cibao fue el lugar donde estrellas del Latin Jazz de renombre internacional se mezclaron con un excelente noneto de músicos de nuestro país dirigidos por Manuel Tejada en una producción de Tommy García, donde entregaron lo mejor de sí a un público que apenas podía mantenerse sentado.
La banda de Manuel (piano) no tenía nada que envidiar a los talentos que durante la noche entrarían al escenario y contaba con Jeremías King (bajo), Otoniel Nicolás (batería), Guarionex Aquino y Joel Ramírez (percusiones), Federico Méndez y una sección de metales que tenía al trombonista Patricio Bonilla, el trompetista Ernesto Núñez y al saxofonista Joel Rosario (alto y tenor).
El concierto inició con una corta pero muy inspirada versión de Why Not (Michael Camilo); para continuar con un Tanga a ritmo de merengue que hace recordar a la versión de Mario Rivera de esta pieza del otro Mario, Bauzá. Buen uso de los metales y la tambora de Joel genial, termina la misma con excelentes ¨piano riffs¨ de parte de Tejada. Con la tercera pieza del concierto comienza el desfile de los invitados – Juan Gomero – cuenta con nuestro Juan Colón en saxo alto y el colombiano Justo Almario en tenor (y bien que jalea).
Después de merecidos aplausos a Almario y Colón sube Poncho Sánchez a las congas y luego de un excelente intro de casi 3 minutos entran los músicos a una muy buena entrega de Watermelon Man (Herbie Hancock); esta cuenta con buenos solos de Federico en guitarra y Patricio en trombón; termina en una gran ovación en reconocimiento a este gran percusionista oriundo de Texas de padres mejicanos.
Sube al piano Bobby Carcasses – el Show Man de Cuba – e inicia su versión de Blues para el Benny (dedicado al More); Bobby Sanabria entra en timbales, Benjamin Lapidus en guitarra y el Show Man no solo toca piano, si no que canta, baila y toca el fluglehorn – impresionante…y todos de acuerdo, pues todos de pie le aplauden.
Bobby Sanabria, esta vez en batería, invita a subir a Juan Colón y Justo Almario a los saxos (alto y tenor), Humberto Ramírez en trompeta, Luís Marín al piano, Jarrengton De León y Josean Jacobo en percusión, mantiene a Lapidus en guitarra y al resto de la banda para una alocada descarga usando la pieza Caravana de Juan Tizol como base para unos inspirados y electrizantes solos de Humberto, Marín y el mismo Sanabria.
Trás tanta energía vino la calma – para muchos la pieza de la noche – una versión a trío de la pieza Alma con Alma (Juan R. Marquez) realizada magistralmente por Luís Marín al piano, Otoniel Nicolás en batería y Jeremías King en bajo. Las notas casí cantaban las letras de tan bella melodía…¨Quiero tenerte cerca, y en un abrazo unirnos / Y así pedirte que estemos todo la vida / Labios con labios, alma con alma¨!!!
Esta pieza le devuelve el concierto a Manuel Tejada y sube al escenario Giovanny Hidalgo, quien de inmediato se convierte en una tormenta en las congas y timbales – realizando una larga introducción a la pieza Manteca. Aparte de Hidalgo, un muy buen solo de Ernesto Núñez en trompeta.
La banda entonces nos entrega unas muy emocionantes Compadre Pedro Juan (Luís Alberti) en versión de Guillo Carías y Suite Camila (Félix Del Rosario) en la que el Maestro Del Rosario bailó y dirigió desde su asiento. Sube al escenario Sabrina Estepan y deja a todos boquiabiertos con su voz y entrega en la pieza Santiago (Juan Lockward) – toda una diva en el escenario!!!
Y para terminar - lo que ha sido hasta ese momento una increíble noche, llena de todo lo que se puede esperar en un concierto de Jazz y más – Manuel y la banda nos entregan todo lo que les queda por dar con las composiciones propias de Tejeda: Sambomba y Sazón.
Un concierto que estremeció, impresionó, puso a gozar a los presentes y nos hizo a todos sentirnos orgullosos de este género musical que nos une desde el Río Bravo hasta la Península Brunswick (Chile – extremos más al sur del continente).
sábado, 23 de abril de 2011
Publicado por Fernando Rodriguez De Mondesert en 11:12 p. m.
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